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Hacía algunos años que la afición roja y blanca de Mérida no asistía a una noche tan especial, donde se jugaran tantas cosas para el entusiasmo del aficionado. Incluso la noche del miércoles --22 de octubre-- estaba en juego la confianza de la gente hacia el proceso del joven técnico José de Jesús “Chuy” Vera. ¿Y el motivo? La Copa Venezuela. Estudiantes ganó en Mérida su choque de ida con pizarra 3-0. Los goles fueron de Díaz, Riascos y Urdaneta.
Estudiantes, que le dio desde el comienzo del torneo la importancia que merecía el mismo, llegó con las baterías cargadas al encuentro de la noche más esperada en mucho tiempo por el aficionado del Académico.El ambiente en la ciudad de Mérida estaba expectante, pues en la fase anterior los dirigidos por el técnico Vera lograron dejar en el camino a uno de los protagonistas del torneo Apertura 2008: el Deportivo Italia.
“Chuy” "un técnico debutante en la categoría de honor de nuestro fútbol" logro conformar un grupo que está conformado por un puñado de jugadores abrazados por grandes valores humanos, esperaban que la alegría de hace una semana, se repitiera para tratar de estar más cerca de la copa y, en consecuencia, el premio de representar a Venezuela en la Copa Nissan Sudamericana.Realmente mucho, para un grupo que crece paulatinamente y que mide cada paso con cautela, gracias a la experiencia de jugadores que saben ganar como Elvis Martínez, Ruberth Morán, Gabriel Urdaneta y el propio ex compañero que ahora funge como entrenador.
La afición Respondio y se bajó a el coloso de Zumba. Pese al calamitoso tráfico y la hora del compromiso "7:30 de la noche", unas quince mil personas llegaron para alentar a Estudiantes y su sueño de seguir con vida en la copa del país. En el Metropolitano, se cocinaba un ambiente de esperanza, y a su vez, de tensión.Los 90 minutos La agresiva propuesta del técnico de Estudiantes, que salió con tres defensores (Díaz, Segura y Rodríguez, un volante recuperador (Leyva) y dos flechas pegadas a las líneas (Acosta y Elvis), más dos volantes de armado (Durán y Urdaneta), junto a los delanteros (Riascos y Morán), comenzó a generar ocasiones para los locales, pero el gol fue esquivo.La expulsión de Leiva cuando quedaba poco para finalizar la primera parte, complicaba más las cosas para Estudiantes, que tiene claro que en la frontera, todo va a ser más complicado.San Antonio con un 4-3-1-2, vino por el empate y algún “golecito” para la sorpresa, y estuvo a punto de conseguirlo, solo que un palo milagroso evitó la caída del meta Tito Rojas.
Para la segunda parte, el Académico (con un hombre menos) sintió la mano de su técnico en las variantes. Salían: Durán y Manuel Rodríguez, para darle lugar a Anyelo Rodríguez y Leopoldo Jiménez que haría su debut como defensor central definido. Posteriormente, Acosta de excelente partido; saldría para dejarle su banda a el Piojo Quintero quien entro para dar mas movilidad en la media cancha y lo logro ya que genero varias jugadas importantes y estuvo a punto de sellar el 4 Gol. Llovió muy fuerte en Zumba, sobre todo en el entretiempo y pese a que reiteradamente los jugadores del Unión Atlético San Antonio se arrojaban al campo acusando calambres, y viviendo de los pitazos del arbitro para que el tiempo se fuera acabando; Estudiantes no se desconcentró y siempre buscó su ritmo y el partido.
Cuando parecía que el gol no iba a llegar, San Antonio creó un par de situaciones que no concretó. Estudiantes lleno de ansiedad, trataba de encontrar la serenidad para hacer el primer gol.Una sucesión de gambetas de derecha y de izquierda de Duvier Riascos culminaron en un centro para la aparición del central William Díaz, quien con rabia, de derecha y a “quemarropa” batió al arquero Hernán Gil. Fue un momento de felicidad y de alivio, de desahogo, de explosión de gritos y sonrisas en la tribuna. Era el minuto 31 del segundo tiempo. Así el 1-0.Un poco tarde para el sufrimiento que se instalaba en la grada, muy temprano para un equipo deseoso de goles.
Nueve minutos más tarde (40 del segundo tiempo), Segura en una salida, un poco más delante de la mitad de la cancha, le dejó un balón a Duvier Riascos, quien solito, inició una carrera y eludió al marcador de la derecha para fabricarse una diagonal en dirección al arco en base a una velocidad descomunal y terminó definiendo ante el portero Gil, marcando un verdadero Golazo para que la fiesta se instalara en la parcialidad roja y blanca. El 2-0 se dejaba leer en la pizarra.Pero habría tiempo para más.
Un par de minutos más tarde, Elvis Martínez en una escapada por su banda izquierda centró un balón a la perfección a Gabriel Urdaneta quien ingresó como centro delantero para, de cabeza, batir nuevamente el arco de Gil y entonces el 3-0 definitivo.La noche esperada con el marcador deseado. Medio boleto para la final.
Estudiantes, de la mano de “Chuy” Vera, comienza a llenarse los bolsillos de victorias y de ganas, derrotando a la mediocridad y a los eruditos que se ufanan de tildarle de atrevido y de analfabeto táctico.
Estudiantes de Mérida: Tito Rojas; Manuel Rodríguez (Jiménez 46), Ortiz Segura y William Díaz; Acosta (Quintero) , Leyva y Elvis Martínez; Durán (Ángelo Rodríguez) y Urdaneta, Riascos y Morán. Entrenador: José de Jesús “Chuy” Vera.
Unión Atlético San Antonio FC: Gil; Cabezas, Carrero, Yaruro y Ramos; Ramíres, Rebellón, Lizarazo; Burguillos; Bueno y Anaya. Entrenador: Juan Carlos Díaz
Arbitro: Maiker Gómez
Aficionados: 14.500 espectadores

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